LOS EFECTOS DEL CONOCIMIENTO DE DIOS
"... el pueblo que conoce a su Dios se esforzará y actuará" - Daniel 11:32Este texto constituye la franca respuesta para una pregunta que surge con frecuencia al respecto de la realidad de la profesión cristiana de muchos que se consideran creyentes.La apatía, el desinterés y la ausencia de entusiasmo en los asuntos de la Iglesia caracteriza no solo a los que consideran innecesario congregarse y ser fieles en la asistencia a la iglesia, sino también en muchos de los que se han impuesto esta rutina de asistir a los cultos. Porque aunque ellos están ahí, su actitud es como la de aquel que cumple un deber solamente.Al hacer este análisis honesto, hay que reconocer que una gran cantidad de cristianos no están realizando ningún esfuerzo por crecer en la gracia y en el conocimiento de nuestro Señor y Salvador (2 Pedro 3.18) y otro grupo, parece solo cumplir con ciertos requerimientos mínimos, suficientes apenas para guardar las apariencias y ser considerados dentro del grupo de los "cristianos". ¿Por qué sucede esto?En lógica, hay un principio elemental que se expresa así: Si A implica B, entonces NO-B implica NO-A. No es difícil de entender, veamos.Si la afirmación o proposición A tiene como consecuencia o efecto el resultado B, entonces, un razonamiento correcto nos lleva a concluir que si el efecto B no está presente es porque la condición propuesta A no se ha cumplido.Tratemos de aplicar este principio lógico al texto bíblico que estamos analizando.Proposición A = El pueblo conoce a Su DiosEfecto B = El pueblo se esfuerza y actúaPero entonces, si no podemos ver que aquellos que dicen pertenecer al "pueblo de Dios" estén esforzándose y actuando tendríamos que concluir que: ¡los tales no conocen al Dios que pretenden adorar!¿Estás esforzándote y actuando?El apóstol Pablo lamentó esta condición en cierta ocasión cuando escribió lo siguiente: "Velad debidamente, y no pequéis; porque algunos no conocen a Dios, para vergüenza vuestra lo digo" - I Corintios 15:34Debemos atender a esta confrontación, el hecho de que en nuestras iglesias tengamos personas que no conocen a Dios debería ser causa de vergüenza, pero muchas veces nos hacemos indolentes al respecto.Nunca debemos pretender que ya estamos haciendo suficiente, todos debemos reconocer que nos falta mucho por cumplir en cuanto a lo que Dios pide de los suyos, pero la pregunta permanece: ¿Te estás esforzando y actuando como resultado del conocimiento que tienes de Dios? - ¿Te esfuerzas por agradarle?El conocimiento de Dios lleva a las personas a esforzarse y actuar y el conocimiento de Dios es algo progresivo, de esto se trata la santificación precisamente, conocer más a Dios nos lleva a vivir más santamente.El apóstol Pablo, estando en la cárcel, escribe a la Iglesia que estaba en Filipos "... todo lo tengo por basura, para ganar a Cristo... a fin de conocerle, y el poder de su resurrección... prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús" (Cap. 3, versos 8, 10 y 14).Debemos preguntarnos ¿No conocía el apóstol Pablo a Cristo? - Claro que sí lo conocía, pero anhelaba conocerle aún más y todas las cosas de esta vida perdían su valor en comparación con esto, y el hecho de conocerle es lo que le llevaba a no desmayar y proseguir hacia la meta trazada.¿Conoces al Dios que dices adorar? ¿Anhelas conocerle más? ¿Te impulsa el conocimiento que tienes de Dios a esforzarte y a actuar en Su servicio? ¿Anhelas conocer más a Dios y esforzarte más? - ¡Que así sea! A Dios se le conoce únicamente por medio de Jesucrito. Amén.Pastor Alexander León J.